Quién soy
Soy una profesora de profesión y pastelera por pasión, con más de 10 años de experiencia en el arte de la repostería. Mi camino en la pastelería comenzó como autodidacta, explorando recetas, experimentando en la cocina y perfeccionándome a través de cursos y tutoriales.
En Venezuela, desarrollé mis habilidades trabajando como sub chef pastelera en un hotel, donde adquirí experiencia en la creación de postres de alta calidad para clientes exigentes. Además, elaboré postres para restaurantes y eventos sociales como matrimonios, consolidando mi conocimiento tanto en la atención al detalle como en la presentación artística.
Posteriormente, en Chile, amplié mi experiencia al laborar en una pastelería y en una planta de producción, lo que me permitió conocer el mundo de la repostería desde un enfoque técnico y estructurado.
Como profesora, he combinado mi vocación pedagógica con mi amor por la pastelería, enseñando este arte a personas interesadas en descubrir un oficio lleno de creatividad y sabor. Creo firmemente que cada postre es una obra de arte que puede transmitir emociones y crear momentos inolvidables.
Mi evolución
Mi evolución como pastelera comenzó como un sueño sencillo: encontrar una forma de generar un segundo ingreso mientras hacía algo que disfrutaba. Mi interés por los postres nació de la curiosidad y de las ganas de explorar nuevas posibilidades, y poco a poco, ese interés se transformó en una pasión que marcó mi camino profesional.
Este proceso no fue inmediato; cada paso estuvo lleno de aprendizaje y dedicación. Al principio, mis recetas no siempre resultaban como esperaba: bizcochos que no subían, texturas imperfectas y sabores que necesitaban ajustes. Sin embargo, estos errores no me detuvieron, sino que me impulsaron a aprender más sobre la química de los ingredientes, tomando cursos y leyendo libros que me ayudaron a comprender cómo funcionan las bases de la pastelería.
Con el tiempo y la práctica constante, empecé a dominar las técnicas y a entender los secretos detrás de cada receta. Trabajar en diferentes entornos, desde eventos sociales hasta plantas de producción, me permitió experimentar y enriquecer mi perspectiva. Cada desafío fue una oportunidad para crecer, y cada logro me acercó más al arte que hoy amo.
Hoy en día, mi pasión sigue creciendo y mi objetivo es claro: seguir aprendiendo y evolucionando en este mundo dulce. Más allá de crear postres, quiero compartir lo que he aprendido y transmitir esa misma pasión a otros. La pastelería no es solo mi profesión, es un viaje lleno de creatividad, dedicación y, sobre todo, amor. 🍰
"A veces, estamos tan enfocados en lo que falta por lograr que olvidamos cuánto hemos avanzado. Pero cuando miro hacia atrás, veo cada error, cada desafío superado y cada pequeño paso que me ha traído hasta aquí. Es en ese reflejo donde realmente entiendo mi evolución y valoro lo lejos que he llegado."